16 jun 2011

Tengo los nervios a punto,

en el hueco del ombligo,

para salir a reventar las calles

con hipérboles tímidas de exceso.


Si te vienes conmigo te digo,

que eclipsaremos cicatrices de cuervo,

al ritmo de hormigas,

con las patas rotas de invierno.

2 comentarios:

Carlos Pérez Rueda dijo...

¡Me voy contigo! ¿Se puede?

lavargasSublima dijo...

Yo ya te llevaba en el bolsillín, miamol.